(Català) Simuladors i drons per controlar els despreniments a les zones de risc

La Solana de Andorra la Vella es una zona recurrente de caída de rocas. La semana pasada, por ejemplo, cayó un bloque de cinco metros cúbicos. Es por eso que todo el sector de canchales está altamente controlado a través de programas de simulaciones y, últimamente, con la ayuda de drones .

La vertiente de Andorra la Vella afectada con la roca de la semana pasada, que bajó por la canal de la contoneo y fue a parar al estacionamiento de una empresa de transporte, es un zona de alto riesgo conocida desde hace mucho años.

Según Josep Maria Huertas , jefe del Gabinete Técnico del Ministerio de Ordenamiento Territorial , “no podemos hablar de evitar que caigan las piedras”, sino que “lo que se intenta saber es cuántos rocas, de qué dimensiones, qué trayectorias y alcance pueden tener “para determinar las actuaciones.

En la caída del bloque de cinco metros cúbicos que bajó por la canal de la R emenada no se tuvieron que lamentar daños importantes, ya que abrió un cráter en el suelo que lo detuvo y fue acompañado de pequeños fragmentos.

Una vez al año y con un helicóptero se repasa toda la geografía más sensible de desprendimientos para poder ver aquellas deslizamientos de bloques que ha habido y que los ciudadanos no han visto.

Fuente
andorradifusio.ad/